RECORRIENDO EL MONCAYO
Publicado: 27 Dic 2016 21:53
Muy buenas de nuevo, como estamos en las fechas que estamos es de rigor felicitaros la Navidad y desearos un prospero y feliz año nuevo. Esta es una buena manera de terminar el 2016, haciendo lo que más le gusta a uno, que nos es otra cosa que montar en moto recorriendo los caminos de este precioso país que tenemos.
Llevaba tiempo con ganas de recorrer esta zona y aunque esta época del año no es la más adecuada por el frío, para allí que fui y claro por la mañana a primera hora y encima con unos 70 kilómetros de niebla, con una temperatura media de - 2 grados, me pelé de frío, sobre todo en el tramo con niebla, se me congelo la pantalla del casco, las mangas de la cazadora las llevaba completamente heladas, los guantes y lo peor de todo es que había tramos en los que había hielo en la calzada y me lleve varios sustos, una vez llegué al punto donde comenzaba la ruta la niebla seguía siendo la protagonista, hecho este que me hizo pensar en darme la vuelta, pero insistí durante unos kilómetros más y voila, apareció el astro rey y todo el horizonte delante mio despejado.
Saliendo de la niebla, ¡por fin!
Cada vez que he recorrido pistas por Aragón, casi siempre están muy cuidadas y hoy no iba a ser la excepción, como me gustan los tonos ocres de esta zona.
Bueno aún tuve que atravesar otro banco de niebla pero este era bastante más pequeño, ¡menos mal!
Otra de las cosas que me sorprenden, es que hay pueblos o aldeas, que todavía no tienen carretera asfaltada, se accede por pistas y al pasar por este pequeño pueblo, me llamo la atención su iglesia y aunque había contraluz le hice una foto.
Cuando recorres tantos caminos, los paisajes van cambiando de una forma constante, lo mismo circulas por una zona de huerta, que atraviesas un pinar o una zona quemada como en este caso, da pena ver como queda todo después de un incendio.
Ya llevaba unos cuantos kilómetros recorridos y al fondo ya se veían las montañas nevadas del Moncayo, aunque había muy poca nieve, no se si es mejor o peor, ya que si hubiera habido mucha, seguro que no podría haber pasado por algún sito.
Otro pueblito, con lo que queda de un castillo fortaleza, quise acercarme a el con la moto, pero tenían cortado el paso con un cable de acero y desistí.
Cada vez más se ve más cerca, o eso parece, pero queda aún.
Ahora si , ya estoy abajo, toca subir al santuario.
Una vez dentro del parque natural, se empieza a ver gente, para los de Madrid y para los que no lo conozcan, es como una especie de Navacerrada.
Desde allí iba a tomar una pista un poco más abajo, pero de nuevo un cable de acero impedía el paso y al ser parque natural no quise jugármela, busque en el GPS el siguiente punto e hice un bucle por carretera, y así pude pasar por Agreda aunque solo le hice unas fotos desde un mirador, este pueblo merece una visita con más tiempo, que haré probablemente en primavera junto con otros pueblos Sorianos.
Retome de nuevo el track y ahí estaban otra vez las montañas nevadas del Moncayo, esta vez desde la vertiente Soriana, ya me quedaba poca pista por hacer, aunque el destino me tenia deparada una sorpresa.
La sorpresa era que la carretera que había elegido para bajar hasta la A2 discurría por unos parajes preciosos, acabando en una especie de cañón, ¡ ESPECTACULAR !
Bueno a pesar del frío de la mañana y la paliza que supone hacer una ruta de 800 kilómetros, mereció la pena.
hasta la próxima
Llevaba tiempo con ganas de recorrer esta zona y aunque esta época del año no es la más adecuada por el frío, para allí que fui y claro por la mañana a primera hora y encima con unos 70 kilómetros de niebla, con una temperatura media de - 2 grados, me pelé de frío, sobre todo en el tramo con niebla, se me congelo la pantalla del casco, las mangas de la cazadora las llevaba completamente heladas, los guantes y lo peor de todo es que había tramos en los que había hielo en la calzada y me lleve varios sustos, una vez llegué al punto donde comenzaba la ruta la niebla seguía siendo la protagonista, hecho este que me hizo pensar en darme la vuelta, pero insistí durante unos kilómetros más y voila, apareció el astro rey y todo el horizonte delante mio despejado.
Saliendo de la niebla, ¡por fin!
Cada vez que he recorrido pistas por Aragón, casi siempre están muy cuidadas y hoy no iba a ser la excepción, como me gustan los tonos ocres de esta zona.
Bueno aún tuve que atravesar otro banco de niebla pero este era bastante más pequeño, ¡menos mal!
Otra de las cosas que me sorprenden, es que hay pueblos o aldeas, que todavía no tienen carretera asfaltada, se accede por pistas y al pasar por este pequeño pueblo, me llamo la atención su iglesia y aunque había contraluz le hice una foto.
Cuando recorres tantos caminos, los paisajes van cambiando de una forma constante, lo mismo circulas por una zona de huerta, que atraviesas un pinar o una zona quemada como en este caso, da pena ver como queda todo después de un incendio.
Ya llevaba unos cuantos kilómetros recorridos y al fondo ya se veían las montañas nevadas del Moncayo, aunque había muy poca nieve, no se si es mejor o peor, ya que si hubiera habido mucha, seguro que no podría haber pasado por algún sito.
Otro pueblito, con lo que queda de un castillo fortaleza, quise acercarme a el con la moto, pero tenían cortado el paso con un cable de acero y desistí.
Cada vez más se ve más cerca, o eso parece, pero queda aún.
Ahora si , ya estoy abajo, toca subir al santuario.
Una vez dentro del parque natural, se empieza a ver gente, para los de Madrid y para los que no lo conozcan, es como una especie de Navacerrada.
Desde allí iba a tomar una pista un poco más abajo, pero de nuevo un cable de acero impedía el paso y al ser parque natural no quise jugármela, busque en el GPS el siguiente punto e hice un bucle por carretera, y así pude pasar por Agreda aunque solo le hice unas fotos desde un mirador, este pueblo merece una visita con más tiempo, que haré probablemente en primavera junto con otros pueblos Sorianos.
Retome de nuevo el track y ahí estaban otra vez las montañas nevadas del Moncayo, esta vez desde la vertiente Soriana, ya me quedaba poca pista por hacer, aunque el destino me tenia deparada una sorpresa.
La sorpresa era que la carretera que había elegido para bajar hasta la A2 discurría por unos parajes preciosos, acabando en una especie de cañón, ¡ ESPECTACULAR !
Bueno a pesar del frío de la mañana y la paliza que supone hacer una ruta de 800 kilómetros, mereció la pena.
hasta la próxima